Mona Sáenz nunca soñó con dejar su exitosa carrera corporativa. Después de sobrevivir a una experiencia cercana a la muerte debido a su enfermedad autoinmune, Mona se encontró con un nuevo sueño y pasión por un nuevo negocio.
Aunque se sintió devastada por no poder regresar al trabajo, Mona rechazó solicitar la discapacidad. En cambio, ella y su esposo Erik abrieron la pulsera de aceites esenciales EOB, creando y vendiendo las joyas de piedra natural que la ayudaron a sanar.
Mientras Mona estaba construyendo su negocio, pasó por el Programa Acelerador de Mujeres y fue entonces cuando la pareja comenzó su relación con LiftFund. Con la orientación de LiftFund y un micropréstamo, posible gracias a una asociación con la ciudad de San Antonio, Mona y Erik evolucionaron el negocio desde su enfoque boutique inicial a un modelo mayorista próspero. «El equipo de LiftFund fue honesto y dio excelentes consejos, y estamos muy contentos de que lo hayan hecho», recuerda Mona.
Hoy, el objetivo de Mona y Erik es compartir su historia y promover la salud integral a través de su negocio. Se inspiran al dar esperanza a cualquiera que pueda estar enfrentando los desafíos que alguna vez enfrentaron.
“LiftFund nos ayudó a convertir un obstáculo en un trampolín”, reflexionó Erik.
